Nunca vas a sentir el amor incondicional hasta que te conviertes en mamá, dicen por ahí… Me he inspirado en esta frase que aprendes a leer en tus primeros años de vida: “mi mamá me mima” ya que es de las primeras cosas que aprendes a leer.

Has pronunciado mamá desde que tienes memoria

Probablemente mamá es la primera palabra que aprendiste y pronunciaste. Y supongo es natural por el lazo que siempre va a existir con ella.  Hace unas semanas durante una platica mi mamá dijo: puedes perdonar todo a tus hijos sin importar lo que hayan hecho por el simple hecho de haberlos parido.

Y me he quedado pensando esto porque, la mayor parte del tiempo o, en esta búsqueda de la felicidad, lo que buscas es encontrar tu propia versión de amor. Y ahora es mi madre quien habla desde su trinchera.  Desde chicos nos vamos construyendo un concepto propio a través de la experiencia, sin embargo, las primeras experiencias son aprendidas en el núcleo familiar.

Del perdón nace el amor

Y sí, a palabras de mi madre, te perdono porque eres mi hija,  me deja pensando en lo siguiente.  Uno no conoce cuánto te puedes querer o querer a alguien hasta que hiere las fibras más profundas del alma y es el amor incondicional el que cura la herida.

Pero el perdón es el eslabón que va a unir estas dos cuestiones, sin embargo, es el amor quien va a soldar los eslabones y hacerlos más sólidos. Es ahí cuando logras tocar entre amor y dolor cuando perdonas, cuando en realidad te planteas seguir adelante y dejar ir el dolor. Y frente al dolor, la posibilidad de trascender una relación fundada en la pureza.

El amor se sublima cuando lo cultivas dentro de ti…

En la meditación encontré una manera pacífica de cultivar el amor y abastecerme de energía positiva. Sin sonar muy mística ni dar una denotación esotérica, meditar ha traído grandes beneficios, sobretodo el de aprender a auto observarme, ir aceptando cada uno de mis defectos y virtudes. Y es a partir de esta aceptación que la carga mental se libera y aprendes a quererte sin la dependencia de algo externo para saber que te quieres.

No necesitas más que encontrar calma en tu interior para que poco a poco encuentres la forma de cultivar el amor, una vez que te aceptas tal cual eres, te perdonas y vives más presente. Es aquí donde te vuelves incondicional de ti misma y te preparas a expresar el amor en sus diferentes matices.

Photo credit: Marcie.